Liébana, Cantabria
Comarca de Liébana
La Comarca de Liébana reúne un conjunto de atractivos naturales, paisajísticos, históricos y culturales, que la convierten en uno de los destinos de turismo rural más afamados de la región.
La conservación de sus pueblos y tradiciones mantiene vivo un estilo etnográfico y arquitectónico de carácter singular, mientras que su gastronomía guarda algunas de las joyas del recetario cántabro.

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Destination
Cabezón de Liébana
Iglesia de Santa María La Real de Piasca
Camaleño
Monasterio de Santo Toribio de Liébana
Cillorigo de Liébana
Iglesia de Santa María de Lebeña
Pesaguero
Casa de la Naturaleza en Pesaguero
Potes
Torre del Infantado en Potes
Tresviso
Subida a Urdón Tresviso
Tour Location
Localización
Imprescindible
Mirador del Corzo
Deporte y aventuras
Si lo que quieres es aventura la comarca cuenta con una amplia oferta de ocio y actividades al aire libre que convierten a Liébana en uno de los enclaves del turismo activo de la región. El senderismo, la escalada, las vías ferratas, el ciclismo de montaña o los paseos en burro o acaballo; el esquí de travesía o las rutas en raquetas de nieve son solo algunas de las atractivas propuestas que encontramos en los distintos pueblos de la comarca.
Vía Ferrata de Socastillo
Gastronomía
Si eres un amante de la gastronomía, estos son algunos de los platos y productos típicos que deberías probar: Quesos de Liébana, la personalidad quesera de la zona tiene un claro reflejo en todos y cada uno de sus quesos, siendo el Picón Bejes–Tresviso y los Quesucos de Liébana dos de las joyas gastronómicas de la región. Ambos cuentan con la Denominación de Origen Protegida;
Carnes y embutidos, en la Comarca se cuenta con materia prima única, con la que elaborar los típicos embutidos artesanos con carne de caza, como jabalí, corzo o venado. Cabe destacar el chorizo, lechazos o cabritos de gran calidad;
El pan de leña, elaborado deforma tradicional, así como sus dulces típicos como las terronillas de Potes, los sequillos, los buñuelos, las torrijas, el canónigo o los tradicionales frisuelos;
Miel y mermeladas, realizadas con productos de las numerosas huertas de la comarca, además la miel cuenta con el reconocimiento de Origen Protegido;
Orujos y licores, producto lebaniego por excelencia, elaborado de forma tradicional, siguiendo unos cuantos procesos de destilación y seleccionando minuciosamente las materias primas;
Vinos, vinagres y sidras, protegidos de vientos y temporales por los Picos de Europa, los viñedos lebaniegos producen distintas variedades de uva blanca y negra, con la que se elaboran unos vinos, en su mayoría tintos, de aspecto brillante y fresco. Asimismo, el privilegiado microclima de Liébana facilita el crecimiento de una deliciosa variedad de manzana con la que se produce la conocida sidra natural de la comarca. Además, la tradición vinagrera lebaniega, ha dado un salto al mercado con un vinagre de vino dulce, elaborado sin ningún tipo de conservantes ni elementos químicos;
Legumbres, frutas y hortalizas, las numerosas huertas del valle, sembradas sobre una tierra fértil y llena de riqueza natural, ofrecen productos frescos y de excepción, entre los que destacan algunos como los arándanos, la patata, la cebolla roja, la berza y el repollo, las judías, las lechugas o los jugosos tomates.
Mención aparte merece el famoso garbanzo de la zona y que es uno de los ingredientes estrella en la receta tradicional del famoso cocido lebaniego.